Por Carles Geli Foto Alberto Estévez (EFE)
El País (Es)
La Associació d’Escriptors en Llengua Catalana (AELC), entidad que agrupa a más de 1.400 autores, desmintió este jueves a este diario que esté detrás de un posible boicot de escritores contra la decena de sellos en catalán de Planeta, reunidos bajo el paraguas de Grup 62, a raíz del traslado de sede social de la empresa editorial de la familia Lara de Barcelona a Madrid.
La polémica surgió al mediodía del jueves, cuando en la cuenta de Twitter firmada por Escriptors Catalans (“Colectivo de escritores que donde ponen el ojo ponen el tuit”, se identifican, registrando más de cuatro mil seguidores) apareció un mensaje en el que se aseguraba que la postura del Grupo Planeta “ha decidido a muchos autores catalanes a dejar la editorial”. El tuit añadía una captura de una carta que estaría funcionando como “modelo de renuncia” y que, dirigida al presidente del Grupo Planeta, Josep Creuheras, solicitaría la revisión de los contratos del firmante para que se iniciase “el proceso legal para rescindirlos todos cuanto antes posible, con la correspondiente liquidación de derechos de autor devengados hasta el momento del cierre”. La decisión se basaría en que el escritor, tras cambiar la sede social de Planeta “de Barcelona (Catalunya)” a “Madrid (Espanya)” le lleva a “no sentirme vinculado, como autor, a una editorial que no cree en el país donde trabaja”.
“No somos nosotros, evidentemente; esa cuenta es un troll nuestro que tiende a boicotearnos”, asegura Bel Olid, presidenta de la AELC y, curiosamente, autora de un libro con Edicions 62, uno de los sellos catalanes de Planeta. Olid, además, desconoce que hayan escritores que se estén desvinculado de esas editoriales. “No nos consta; por otro lado, pocos autores tienen pactos de exclusividad; la mayoría publicamos con diversas editoriales”. Según la presidenta de la entidad, tras el anuncio de la marcha de Planeta “nos pusimos en contacto con ellos y nos confirmaron que sus sellos catalanes no se irían”.
Esa tesis la ratificaba ayer Albert Pèlach, director general del Grup Enciclopèdia Catalana, sello histórico y de producciones editoriales muy simbólicas que participa, junto a Planeta, en el accionariado de Grup 62, si bien de manera minoritaria. “Las editoriales catalanas de Planeta no se moverán de Cataluña; hay consejos de administración fijados por calendario y no está previsto abordarlo; si editas en catalán lo lógico es que estén en Cataluña y ahí estarán sea Cataluña región, comunidad autónoma o república”. La supuesta posible marcha de autores causa cierta preocupación y enfado entre representantes de los sellos de Grup 62 que, en privado, creen ver la mano de la AELC en la posible huida de escritores de sentimientos independentistas.
Pèlach y esos miembros de Grup 62 se encontraban ayer en la inauguración oficial del estand conjunto que la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona tienen en la Feria de Fráncfort. En el acto, se leyó un manifiesto de la Associació d’Editors en Llengua Catalana en el que condenaba la actuación “altamente represiva y violenta” de la policía durante la jornada del referéndum del 1-O y se reafirmaba en “la fortaleza de la palabra como única herramienta para resolver los conflictos. Si nos dedicamos al oficio de editar es, en buena parte, porque compartimos esta convicción en la capacidad de actuar desde la no-violencia, con argumentos e ideas, nunca con golpes ni armas. Y esperemos que los compañeros del mundo editorial, de todo el mundo, nos apoyen en esta reivindicación tan nuestra y tan universal a la vez”.