Desde su invención, el espejo es un elemento que ha cautivado a la humanidad. Cuando el imponente palacio francés de Versalles abrió su famoso salón de los Espejos, se convirtió muy pronto en lugar de peregrinación obligado de la gente, fascinada en verse reflejada.
Borges también encontró en los espejos una metáfora infinita de posibilidades para sus juegos literarios.
Y ahora, ‘La palabra, espejo sonoro’ es el lema del Concurso Nacional de Poesía, de la Casa de Poesía Silva, cuya convocatoria cierra el 16 de septiembre.
El jurado de esta edición, conformado por los escritores Eduardo Gómez, Helena Iriarte y José Luis Díaz-Granados, será el encargado de escoger los textos ganadores, que se conocerán a mediados de octubre.
“Se entregarán diez premios: cinco de dos millones de pesos y cinco de un millón de pesos. El jurado, además, otorgará cinco menciones”, anota la entidad.
Los participantes deberán enviar un poema inédito en español, firmado con seudónimo, impreso o mecanografiado a doble espacio y en tres copias, en sobre dirigido a la Casa de Poesía Silva, calle 12C n.º 3-41, en Bogotá, que diga ‘Concurso La palabra, espejo sonoro’.
Las otras bases del concurso se pueden consultar en la página web www.casadepoesíasilva.com.
Tomado de El Tiempo