Alberto Mendoza Morales, que, con una acreditada trayectoria de planificador económico y social, emprendió una empresa periodística de gran aliento llamada “Anatomía de un país”. Durante siete años, la voz de Mendoza Morales dio identidad a muchas regiones, y su obra hizo historia cuando se necesitaba identificar el ADN de una nación desconocida.
Después de “Anatomía de un país”, llegó “Anatomía de las regiones”, “Anatomía de Bogotá”, “Así creció Colombia”, un compendio secuencial de información sobre la nación, su devenir histórico, sus secretos territoriales, la etnografía de su gente, un legado periodístico que los lectores de esos tiempos coleccionaban hasta empastar. El aporte de Mendoza Morales tuvo tanto éxito que no sólo crecieron las ventas cuando se hacían ediciones diferenciadas para las regiones, sino que “Anatomía de un país” recibió el premio Simón Bolívar y el Internacional Sip-Mergenthaler.
Nacido en Ibagué en enero de 1926, en una familia de ocho hermanos, Alberto Mendoza Morales creció recibiendo las instrucciones de la comunidad salesiana y el colegio San Simón, hasta que su familia lo envió a Bogotá a concluir su bachillerato en el colegio mayor San Bartolomé. Después fue a Chile, de donde regresó graduado como arquitecto en 1951. Desde ese momento, a partir de una especialización en planeación y vivienda que adelantó con la OEA, tomó una ruta de formación permanente en asuntos de planeación regional y urbana.
Son incontables las misiones, asesorías o capacitaciones en esta materia. Durante casi una década desplegó su conocimiento en Venezuela, Nicaragua y, por supuesto, en Colombia. En ese trasegar por el mundo del conocimiento, tomó contacto con múltiples zonas del país, con las que empezó un diálogo cooperativo, como él lo denominaba, para conocer las entrañas de una nación diversa y también urgida de conexiones con la modernidad. Esa dinámica lo puso en contacto con grandes líderes del país, al punto de que fue asesor de Carlos Lleras Restrepo o consultor de Belisario Betancur, entre otras relaciones.
Con esa avidez de saber, la vida lo llevó a selectos círculos académicos, en algunos de los cuales fue impulsor. Fue presidente de la Sociedad Colombiana de Planificación; durante 18 años ofició como presidente de la Academia de Ciencias Geográficas; perteneció a la Sociedad Bolivariana de Colombia y a la Academia de Historia Militar. Su voz autorizada marcó una época del país, sin que la mayoría supiera que también Mendoza Morales fue un hombre docto en temas universitarios en otras latitudes, con importantes aportes para el desarrollo educativo de América.
Mendoza era miembro de la Academia de historia del Tolima, fue publicado por Pijao Editores y además reconocido también por esta casa editorial como uno de los 'Protagonistas del Tolima Siglo XX'.
Con información de El Espectado