Por Carles Geli
El País (Es)
La defensa de la bibliodiversidad y la visualización del trabajo de las pequeñas editoriales independientes tienen en Cataluña una auténtica fortaleza en Besalú (el bastión Bisuldunum, en La Garrotxa), donde este fin de semana se celebra ya la octava edición de la feria Liberisliber. “No hay otro evento literario con un formato así y, desgraciadamente, nuestra presencia en librerías y en catálogos bibliotecarios sigue siendo reducida”, apunta Miquel-Àngel Codes, director y creador en 2010 de un encuentro que arrancó con 15 editoriales, pero que se consolida a cada convocatoria que pasa: este año son ya 50 los sellos presentes (43 de Cataluña, dos de Madrid, dos de Aragón y una de Andorra, Baleares y Valencia), tres más que en 2016.
Con cierta sensación de feliz crisis de crecimiento —“sé que tenemos una gran iniciativa entre manos y que podemos crecer por la vertiente profesional, pero cuesta mucho”, dice Codes—, la feria mantiene su tono festivo y los actos (38 en esta ocasión) gratuitos, si bien este año se estrena un speed dating (citas breves) que intentará vincular a ilustradores con editores.
Combinando nombres reconocidos y otros noveles, el extenso programa ofrece, por ejemplo, diálogos como los que mantendrán los catedráticos de Economía Juan Torres y Antón Costas (hoy, a las 12 horas), el director de cine Albert Serra con la traductora Valeria Gaillard y el estudioso Félix Fanés a propósito de Proust (domingo, 18 h), o el filósofo Josep Maria Esquirol con la periodista Laia Altarriba y la directora de cine Alba Sotorra, debatiendo sobre qué cultura se produce realmente hoy (sábado, 17 h).
Un concierto de Roger Mas (domingo, 19 h) y un recital de Alberto San Juán (domingo, 17h), un intercambio de experiencias entre los dramaturgos Pau Miró, Carol López y Jordi Casanovas (domingo, también 17 h), una intervención poética de Blanca Llum Vidal con textos de Víctor Català (sábado, 18 h), traductores como el japonés Ko Tazawa (sábado, 11.30 h), el fallo del premio Francesc Garriga de Poesia (sábado, 18.45 h) o firmas de autores, talleres y presentaciones de novedades son algunas de las ofertas de una feria que, aunque pequeña (su presupuesto es de 74.000 euros), exige rigor: “Este año hemos dejado fuera 25 editoriales por espacio y porque nos pareció que sus catálogos no cumplían unos requisitos mínimos”. Liberisliber como una fortaleza, pequeña, pero de calidad.
